En una Comarca del Territorio Global, con coincidencias y diferencias sus habitantes convivían y tenían un gobierno dado por ellos a su modo y manera; la Comarca estaba bendecida por cuantiosos recursos naturales que poseía, los cuales eran ambicionados por un Jerarca Imperial muy poderoso, conflictivo y acostumbrado a despojar a otros de sus riquezas a cambio de “la libertad” pero bajo términos y condiciones que a su vez imponía.
En épocas anteriores, gracias a jefes complacientes e incompetentes de la Comarca en ese entonces, el Jerarca Imperial usufructuó a placer los recursos y riquezas pertenecientes a los “comarqueros”, pero el surgimiento de un líder amoroso por la Comarca y su historia, revirtió esa situación y la Comarca recuperó la verdadera libertad y así también el dominio de sus riquezas y bienes naturales.
Ante ello, el Jerarca Imperial manifestó su prepotencia y juró “torcer el brazo” al gobierno de la Comarca “para hacer chillar su economía”; firmó un decreto declarándola una “amenaza inusual y extraordinaria para su seguridad” y asumió “derechos” de aplicación a cuanta medida sancionatoria le viniera en gana para precarizar la vida de los “comarqueros”; creó un formato de “Gobierno Paralelo” utilizando “comarqueros” traidores (Parlamentarios y Charleros Mediáticos) que algun payaso se auto juramentase como presidente; le brindó “Reconocimiento Imperial” y por esa vía se apropió de Reservas, Empresas, Bienes, Inversiones y otros Bienes Económicos y Monetarios que la Comarca poseía en el extranjero; usó su moneda (el dólar) como arma de guerra para destruir la moneda del “comarquero”; impidió además cualquier transacción financiera, compra, venta o traslado de todo insumo requerido para la operatividad o normal vida dentro de la Comarca. Para multiplicar el efecto destructivo de sus sanciones, encargó a los “Charleros Mediáticos” imponer etiquetas tales como: “este gobierno es ilegítimo”, “aquí no se puede vivir”, “es un Dictador”, “las sanciones son contra del gobierno”, “el gobierno es culpable de tus dificultades”, “la crisis es producto de la corrupción”, “salarios y pensiones de hambre”, “el gobierno te niega el aumento de salario”, entre otras mentiras incluidas en ese perverso formato.
Vale señalar, que en su maléfico propósito, ese “Jerarca Imperial” siempre ha utilizado a operadores políticos para activar gremios y organizaciones sociales, dar inicio a una lucha de “justo reclamo reivindicativo”, hechos dónde siempre aparecerá la premisa “hay que salir de este mal gobierno”.
Con todo ese panorama, fomentado por ansias de un Jerarca Imperial, la vida en la Comarca no se ha detenido, con “comarqueros” cansados, confundidos, reinventados, motivados, o cual sea su estado de ánimo, el esfuerzo y la resistencia ha continuado.
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