El
Día
de los Inocentes es
una tradición pagano-religiosa
que
los venezolanos celebran
cada 28 de diciembre uniendo
el
sentido del humor a
las expresiones culturales para
“tomar el pelo” a familiares y amistades.
Dicha celebración, conocida también como Fiesta de los Santos Inocentes, tiene un origen cristiano referido en el pasaje bíblico donde el Rey Herodes I, temeroso de perder su poder, encomendó a los Reyes Magos informar el paradero del que llamaban Rey de Reyes e inició la matanza de los niños del reino y de Belén.